Hay personas que dudan de que merezca la pena el esfuerzo de ir a una manifestación como la del 14M porque piensan que es casi imposible conseguir modificar las decisiones políticas que nos disgustan. Quienes piensan así no se dan cuenta de qué significa esta manifestación. Nos manifestamos no para conseguir un éxito político inmediato (aunque nos encantaría conseguirlo), sino y sobre todo para hacer lo que está en nuestras manos para evitar que la sociedad española deje de pensar en el aborto y éste se banalice aún más en la conciencia colectiva.
Con la manifestación del 14M queremos no ser cómplices del silencio colectivo sobre el aborto, queremos generar dinámicas sociales de recuperación de la conciencia de que el aborto es algo terrible a lo que no podemos acostumbrarnos. Con manifestaciones aparentemente inútiles y fracasadas comenzaron los grandes cambios en defensa de los Derechos Humanos en la historia.
Las primeras manifestaciones de los antiesclavistas aparentemente no consiguieron nada, al igual que las primeras manifestaciones de las activistas en defensa de la igualdad de hombres y mujeres, como aparentemente tampoco conseguían nada aquellas primeras manifestaciones de los obreros polacos a comienza de los años 80 contra el comunismo, o las manifestaciones contra la segregación racial en EEUU a mediados del siglo pasado. Pero, gracias a aquellos manifestantes, que aparentemente no conseguían nada, en poco tiempo se lograron cosas tan valiosas como la abolición de la esclavitud, el reconocimiento de los derechos de las mujeres, la caída del totalitarismo comunista en el este de Europa o las políticas de erradicación de la desigualdad de las personas de color en EEUU,
La Historia necesita gente valiente y coherente que dé la cara por causas aparentemente imposibles porque son esas gentes las que, imbuidas de esperanza en el futuro, logran mejorar la calidad ética de las sociedades.
Los que mañana nos manifestaremos en defensa de la vida probablemente no conseguiremos ningún éxito político inmediato, pero estaremos sentando las bases para que antes o después en España no haya abortos y las leyes protejan coherentemente al no nacido y a la mujer embarazada. Sin este esfuerzo de hoy no seria posible el éxito de mañana.