La mochila “solidaria”
Hablando con una amiga de cómo los padres deben estar al tanto de la formación que reciben sus hijos en los colegios me comentó lo que le había ocurrido a su hermano. Lleva a una hija a un colegio público próximo a su domicilio. Un día su hija de 9 años, llegó con una mochila que no era la suya y su padre le preguntó de quién era. Ella le explicó que era la “mochila solidaria” que le habían dado en su clase y que allí llevaban libros que les dejaban en el colegio de forma que todos pudieran beneficiarse sin tener que gastar dinero. Su padre la abrió y viendo el contenido de los folletos y guías sobre sexualidad, se quedó horrorizado y fue a protestar al director del Centro. Este le dijo que él no podía hacer nada, que hablara con el APA y a estos les pareció que era una tontería.
El no se quedó parado porque le parecía injusto que desde el colegio les inculcaran semejante basura a sus hijos y decidió ir a recoger a su hija durante unos días al Colegio y a todos los padres de las compañeras y compañeros de su hija, preguntarles si sabían lo que contenía la mochila. Nadie lo sabía y él se lo advirtió y les dijo lo que leían sus hijos. Tuvo así la oportunidad de alertar a los padres para que estuvieran más encima de lo que se les enseña en el colegio.
A los pocos días este mismo padre le preguntó algo acerca de lo que les habían explicado en clase. Su hija, con naturalidad, le comentó que les habían explicado que una persona podía nacer siendo mujer u hombre, pero que eso no significaba nada que, lo verdaderamente importante era lo que cada uno se sintiera…
Su padre corroboró una vez más la ideología de género que le estaban transmitiendo en ese Centro pero como de momento no puede cambiarla, está pendiente de ayudar a su hija en los estudios y enterarse del adoctrinamiento que hacen en ese Centro y está tratando de que más padres hagan lo mismo.
A esta amiga, le insistí en que animara a su hermano y a otros padres con preocupación por la formación de sus hijos, a que trataran de meterse en el APA para influir positivamente.
(Conchita, de Zaragoza)