Zapatero se compromete a hacer una ley educativa de «calidad auténtica» El presidente del Gobierno,José Luis Rodríguez Zapatero, mantuvo ayer un encuentro con profesores de todos los niveles no universitarios (Infantil, Primaria, Secundaria, Formación Profesional y Enseñanzas Musicales y Artísticas) procedentes de varias Comunidades Autónomas para conocer de primera mano su situación y analizar diversos aspectos del sistema educativo. Al acto, con el que el jefe del Ejecutivo quiso poner de relieve el apoyo de su Gabinete a la educación, asistió la titular del departamento, María Jesús San Segundo.
Zapatero reiteró que la educación es «una prioridad» en su tarea al frente del Gobierno y señaló que su intención es «hacer una ley educativa de calidad auténtica» y que «será hecha con los profesores y con el objetivo de dignificar su función», porque la «esencia de un buen sistema educativo son sus profesores» y la sociedad debe saber que su futuro depende del reconocimiento a quienes desempeñan esa tarea. En opinión del presidente, «el apoyo permanente a los profesores» garantizará la extensión de la educación, la mejora de la calidad y el logro de los niveles más avanzados de formación de los ciudadanos. En este contexto, señaló también que «quienes pueden salvar a un país son los profesores» -medio millón en España- y se refirió a las dificultades que estos profesionales deben afrontar diariamente en el desempeño de su labor. Resaltó además que el profesorado «ha dado una lección» para inculcar los valores de convivencia cívica y progreso social. Entre ellos, mencionó la defensa de la paz, la lucha contra el terrorismo y el estar cerca de las personas que sufren.
Zapatero, quien anunció que al inicio del próximo curso mantendrá reuniones similares a la de ayer, saludó a los docentes invitados al acto y comentó que entre ellos se encontraba su profesor de Lengua y Literatura en Bachillerato, Alfonso García, al que agradeció la visión humanista de la sociedad que le había inculcado.
Concluido el encuentro, Alfonso García, que todavía ejerce como profesor en León y que se mostró muy emocionado, comentó de Zapatero que era «un alumno con cabeza bien amueblada», con un «alto concepto de la solidaridad con sus propios compañeros y al que le preocupaban muchas cosas, además de estudiar». Como profesor de Literatura, resaltó que el presidente del Gobierno «tenía una enorme capacidad de juicio y de enjuiciamiento de las obras literarias». El que fuera su profesor de Bachillerato aseguró que nunca tuvo que dar una «reprimenda» a Zapatero porque era «muy obediente y tenía su propia personalidad».
Nuevo director de la Aneca
Por otra parte, Francisco Marcellán, hasta ahora vicerrector de la Universidad Carlos III, fue nombrado ayer nuevo director de la Agencia de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca), en lugar de Ismael Crespo, nombrado por el anterior Gobierno y cuyo mandato ha suscitado diversas polémicas en la Universidad.
Sin embargo, el Sindicato de Profesores Anpe calificó la reunión de Zapatero con docentes de Infantil, Primaria y Secundaria de «desprecio a los representantes legítimos del profesorado» y apuntan a que el presidente del Gobierno no ha querido reunirse con docentes de Anpe «porque no ignora la actitud crítica de la organización sindical y ha preferido reunirse con profesores afines a su política educativa». El vicepresidente de este sindicato, Nicolás Fernández, señaló que este primer encuentro del Gobierno no se ha realizado «con los verdaderos interlocutores del profesorado» ya que no han estado presentes representantes de ninguno de los sindicatos de este sector educativo.
Además, precisó que «las prioridades anunciadas por Zapatero son más políticas que educativas» e insistió en que «la ministra de Educación aún no ha querido convocar la Mesa Sectorial de Educación para abordar los temas de actualidad educativa y negociar las demandas prioritarias del profesorado en este foro de negociación». Para Fernández, la llamada «paralización» de la Ley de Calidad anunciada por Zapatero sólo tiene el objetivo de ganar tiempo para plantear una alternativa que no llega. Por ello, considera que lo más adecuado hubiera sido mantener en vigor las medidas de la LOCE «sin perjuicio de que durante la legislatura se plantearan reformas». Para Anpe, con la paralización del calendario de aplicación de la LOCE quedan en suspenso medidas tan importantes como los Programas de Iniciación Profesional o los itinerarios y considera que se produce «una vuelta atrás».
No obstante, Fernández reiteró la disponibilidad de su organización para abordar con el Gobierno y con las autoridades educativas «los temas que verdaderamente afectan a las condiciones de trabajo de los profesores de toda España».