Diane-35, una píldora hormonal, está protagonizando una controversia con fallecimientos de mujeres incluida. Esta píldora de la química alemana Bayern está destinada a tratar el acné y la vellosidad excesiva en las mujeres, pero a menudo se usa también como un anticonceptivo. Según el Centro de Farmacovigilancia de los Países Bajos en LAREB, que rastrea las reacciones adversas a medicamentos en el país europeo, el medicamento es el causante de la muerte de 27 mujeres sólo en Holanda.
La mayoría de las mujeres que murieron eran menores de 30 años de edad, y la mayoría murió de embolia pulmonar o trombosis después de que la droga causara coágulos sanguíneos que se forman en el cuerpo y que luego se alojan en el cerebro, los pulmones o el corazón. La píldora también se ha vinculado a estadios de depresión en mujeres por los investigadores en el Reino Unido.
A principios de este año, Francia prohibió la Diane-35 después de que cuatro mujeres murieran y más de 100 desarrollaron coágulos de sangre potencialmente fatales después de tomarla, pero las autoridades sanitarias de la Unión Europea ordenaron al país a levantar la prohibición en julio, al dictaminar que los beneficios del medicamento superan los riesgos cuando se toman como se indica: para combatir el crecimiento del acné o el vello no deseado. Sin embargo, la comisión de la UE advirtió que el uso fuera de etiqueta de la droga como un anticonceptivo no era aconsejable, según informa el portal Life Site News.
Casos médicos en diferentes lugares del mundo
Diane-35 y su fabricante, Bayer, también han sido objeto de críticas en otros países, ya que las mujeres, en su mayoría jóvenes sanas, siguen muriendo por los efectos secundarios del fármaco. En 2001, el Reino Unido emitió una advertencia sobre el riesgo de trombosis venosa profunda asociada con Diane-35, y un estudio de 2009 en Dinamarca mostró que el riesgo de este tipo de coágulos de sangre de los pacientes aumentó casi siete veces en el primer año de uso. Tanto Australia y Canadá han puesto en marcha investigaciones sobre la seguridad de Diane-35 en el último año, impulsado por la prohibición francesa y el activismo de los padres que han perdido a sus hijas por la droga.
En Canadá, uno de esos padres es Bruce McKenzie, cuya hija, Marit, una joven de 18 años de edad y estudiante de primer año en la Universidad de Calgary, falleció el 28 de enero, después de tomar Diane-35 durante menos de un año.
En las semanas antes de su muerte, la adolescente se sentía cada vez más débil, quejándose de fatiga constante, hasta que una noche llamó a su padre alertándole de que su ritmo cardíaco había aumentado y que no podía respirar. Su padre, Bruce la llevó directamente al hospital donde sufrió cuatro ataques al corazón antes de que los médicos se dieran cuenta de que tenía una embolia masiva bloqueando el flujo de sangre a los pulmones. Dos días más tarde la chica de 18 años falleció.
A la muerte de esta joven se le suma otras 13 mujeres canadienses cuyas vidas han terminado prematuramente por el Diane-35 desde 2000, según la base de datos de eventos adversos de Health Canada. Ocho de esas mujeres eran menores de 21 años de edad. Otras 165 han sufrido lesiones graves o incapacidad permanente por el medicamento.
Canadá ha puesto en marcha varias investigaciones sobre la seguridad de Diane-35 durante los últimos diez años, pero cada vez la agencia de salud ha concluido, al igual que la UE, que los beneficios del medicamento son mayores que sus riesgos.
En cuanto al fabricante del medicamento, Bayer, manifestó sus «más profundas condolencias a las mujeres y sus familias que sientan que han sido afectados negativamente por Diane-35». Y agregó: «Bayer está por supuesto disponible para colaborar con las autoridades sanitarias respectivas sobre el uso y el perfil de riesgo y beneficio de Diane-35”.