Si eventualmente, el Tribunal Constitucional (TC) declarase constitucionalmente válida la Ley del año 2005, por la que se suprimió el matrimonio para equipararlo a las uniones de mismo sexo, la postura de los millones de personas que en España pensamos que esa es una Ley profundamente injusta- y en consecuencia, la postura del Foro de la Familia-, no cambiará ni un ápice: seguiremos defendiendo que se trata de una Ley injusta y seguiremos trabajando para su derogación y sustitución por una Ley que reestablezca el reconocimiento y protección del matrimonio como institución específica para la unión entre un hombre y una mujer.
Una mala Ley no se convierte en buena ni por la aprobación del Parlamento ni por el visto bueno del TC. Desde el Foro de la Familia seguiremos trabajando, pase lo que pase en el PP, para construir una mayoría social y, en consecuencia, una mayoría política que haga de las leyes españolas normas protectoras del verdadero matrimonio, de su estabilidad y permanencia en el tiempo, de la natural protección del matrimonio en la apertura a la vida y en la defensa de esta.
Las grandes cuestiones en que se juega construir una sociedad humana o deshumanizada están más allá de las mayorías políticas coyunturales, de las leyes vigentes y de las sentencias de los tribunales, es una responsabilidad permanente en el tiempo seguir trabajando para crear leyes justas en sociedades comprometidas con la verdad natural sobre el hombre.