Alexandra Maria Linder, vice-presidente de ALfA (Alemania)
Artículo Publicado en la revista alemana KOMMA
Artículo escrito por una periodista alemana que asistió al congreso abortista el pasado mes de octubre en Sevilla. En él habla del congreso y algunas de las conclusiones.
La FIAPAC (Federación Internacional de Profesionales del Aborto y la Contracepción) es la única organización internacional que públicamente hace propaganda para ofrecer el aborto como servicio seguro y legal a mujeres en todo el mundo. Para realizar este objetivo, entre otros, organizan congresos donde intercambian estrategias, presentan iniciativas que tuvieron éxito y discuten desarrollos problemáticos de otras tácticas.
Este año, el congreso tuvo lugar en el hotel Melià Sevilla, con más de 600 participantes que vinieron de 48 estados, entre ellos países con (casi) aborto libre como Estado Unidos, Canadá o África del Sur, y países donde el aborto está prohibido o sólo es posible bajo ciertas condiciones, como Brasil, Nicaragua o Burkina Faso. Ninguno de los participantes dudó del objetivo mencionado en el lema «Achieving excellence in abortion care» («Alcanzar la excelencia en la asistencia del aborto»), exclusivamente se trató de perfeccionar la técnica y legalizar la cosa.
Durante las sesiones del congreso nunca hubo discusiones y rara vez la formulación de alguna pregunta. La cantidad de contradicciones evidentes y de contenidos dudosos fue grande. Los ponentes por ejemplo, hablaban de la misma cosa: las mujeres irlandesas que tienen que abortar en Inglaterra; dónde uno de los ponentes mencionó la cifra de 5.000 mujeres por año, y otro habló de 7.000 mujeres. En general, nadie tenía preguntas para aclarar las cifras. Los ponentes normalmente no comprobaban sus argumentos o números. Existe el presunto número de 70.000 mujeres que por año que mueren tras la práctica de abortos ilegales en todo el mundo (ésta cifra fue corregida por expertos y reducida a más o menos 34.000 mujeres). Todos los participantes estaban seguros de la gran necesidad que hay para que las mujeres de todo el mundo recibieran contracepción artificial – un hecho que nunca fue comprobado. La mortalidad de mujeres en el mundo por este tema es realmente alarmante: entre 320.000 y 500.000. De estas, 34.000 mujeres son quizá las que mueran por la práctica de abortos ilegales-, como solución perfecta, el congreso recomendó el aborto legal. Aun cuando fuera ésta una verdadera solución, solamente un 13 % de estas mujeres podría sobrevivir. ¿Y el otro 87 % que necesitan asistencia durante el embarazo y después del parto? No se propuso ninguna solución para ellas.
Otro ejemplo: en Suecia, el porcentaje de chicas jóvenes que se quedan embarazadas y abortan es muy alto. Además, un 15 % de estas chicas reinciden. El número de abortos es mucho mayor que el de nacimientos entre jóvenes. Ante este problema, y encontrar posibles soluciones, una universidad hizo un estudio con jóvenes que habían abortado después de tres ó cuatro semanas. En el estudio participaron 12 jóvenes y los resultados mostraron que, 11 de ellas participaron solamente por teléfono. Además, los abortistas saben que los anticonceptivos tienen defectos y no son seguros; sin embargo, la única solución propuesta en el congreso fue la promoción masiva de anticonceptivos, junto con información para los padres en el que se les incita a aceptar la contracepción artificial para sus hijos. Incluyendo el bajo nivel del estudio, el rudimentario estudio dejo patente que la propuesta definitivamente no va a ayudar a los jóvenes. Con estos hechos uno puede tener sospecha de que esta gente sacrifique todo a una ideología. Una alegría para empresas farmacológicas que producen anticonceptivos y medios del aborto y por eso celebran este congreso con mucho gusto y dinero.
En general, esta gente considera el aborto como un servicio normal para mujeres dentro del margen de «salud sexual y reproductiva». Las preguntas o dudas referidas al niño ya no existen porque han introducido términos nuevos como: un niño no es un hombre; que después del nacimiento, un embarazo no es un embarazo después de la nidación en el útero… Por estos motivos, los medios que promueven los abortistas -como la píldora, la píldora del día después o el dispositivo intrauterino- no son medios de aborto sino anticonceptivos.
Correspondientemente, el congreso habla de la técnica y de las posibilidades para abolir todas las restricciones que puedan impedir el acceso seguro y legal al aborto. Por ejemplo, en Alemania, el reglamento es un problema para los abortistas, porque piensan que la consulta obligatoria antes de recibir el permiso para abortar, forma una «tutela por personas a las que la mujer no conoce». Pero, si se trata del consejo para utilizar anticonceptivos, la misma gente lo considera muy importante y útil. Dicen que las jóvenes de 14 años pueden tomar decisiones por ellas mismas y por eso piden que puedan abortar sin necesidad de informar a sus padres. Respecto a esta cuestión tampoco se hicieron preguntas, tales como ¿por qué hay tantas jóvenes embarazadas si todas pueden utilizar anticonceptivos?, o ¿por qué es necesario y normal que los jóvenes tengan vida sexual a los 14 años? No hubo tampoco discusiones sobre un comportamiento responsable con la sexualidad. El objetivo final de los abortistas es: Sexualidad libre en todo momento y con cada persona, sin tener miedo de las consecuencias.
La estrategia ahora es abortar muy temprano, hasta la novena semana del embarazo, y utilizar dos métodos: la píldora abortiva RU 486 con prostaglandino y el Aspirador Manual Intrauterino, un aparato que se utiliza sin corriente y sobre todo en los países del «Tercer Mundo», pero, cada vez más, también en los Estados Unidos o en México. Con este aparato se puede hacer abortos secretos, la utilización oficial es «promover la menstruación», de esta manera han abortado millones de niños, muchas veces sin que sus madres lo sepan, y también en países donde el aborto está prohibido, como en Bangladesh. Otro argumento para abortos muy tempranos es que como el niño es tan pequeño, la gente ya no puede hablar de una persona.
Una de las posiciones más extremas del congreso fue la de pedir la abolición de la menstruación porque es una molestia para las mujeres, y además, de esta forma no existiría una contracepción natural ya que la contracepción sería artificial.
De lo que te podías dar cuenta continuamente es que los únicos enemigos a que los abortistas todavía toman en serio son la iglesia católica y las organizaciones pro vida. Siempre se consideraban como un gran problema en los objetivos de los abortistas, porque, como constataban, hacen un trabajo excelente, cooperan con Gobiernos, intituciones, etc. Un obispo de Lituavia impidió la introducción de la RU- 486; en países como Polonia e Irlandia siempre bloquean decisiones pro-abortistas en Europa. Las organizaciones pro vida siempre están presentes en la mayoría de los países.
Otro problema para los abortistas fueron las manifestaciones delante del hotel y durante todo el congreso. Había cierto desasosiego entre los asistentes al congreso, la gente no se encontraba tan tranquila como aparentaban. Recomendaron, durante la gran manifestación con miles de participantes, no salir del hotel o, en su caso salir quitándose el símbolo «FIAPAC». Esta situación revela otro objetivo del congreso: la gente quiere y tiene que fortalecerse el uno al otro porque sabe que la guerra aún no se ha perdido. La inseguridad de los abortistas también se manifestó con la presencia de una niña muy simpática de dos años de Sri Lanka. Cuando las mujeres pasaban, sus caras se hacían aún más duras, casi nadie sonría. La niña molestaba interrumpiendo el silencio y saltándose las barreras de seguridad del congreso. Y es que los abortistas saben lo que hacen cada día y conocen el mal que causan cada día a ellos mismos, a las mujeres y familias. Y también saben que aún no han vencido mientras sus últimos enemigos no suspendan la lucha.
