El presidente del Foro de la Familia, Ignacio García-Juliá, ha denunciado que, con la iniciativa «Educación Afectivo sexual» en las aulas, «el Gobierno de Murcia vulnera derechos constitucionales de los padres».
«Estas charlas, impartidas por el colectivo No te Prives, vulneran los artículos 16.1, 27.3 y el 39 de la Constitución española, y la jurisprudencia del Tribunal Supremo, al tratar de imponer una visión concreta e interesada sobre valores y sexualidad, que es competencia exclusiva de los padres», subraya García-Juliá.
Por su parte, Alfonso Galdón, presidente del Foro de la Familia en la Región de Murcia, reclamó que la Consejería «garantice que los alumnos que reciban esta charla cuentan con la autorización expresa y por escrito de los padres, que se nos faciliten los contenidos que se impartirán, el momento en que se realizará y quiénes la imparten, garantizando que estas personas tienen cualificación suficiente para tratar asuntos tan importantes».
«Es lamentable que, con la excusas como la convivencia o la tolerancia se trate de inocular a los menores una forma de ver el mundo particular, minoritaria, de la sexualidad, las relaciones, usurpando el derecho y deber constucionales de los padres como garantes de la educación de sus hijos», analiza García-Juliá. «los valores de respeto, convivencia etcétera están perfectamente protegidos en la legislación española, se incluyen de manera clara en los programas escolares y no es necesario enseñar sexualidad sin los padres, que son quienes deben encargarse de ello«.
«Respeto al colectivo, no a la imposición de una visión particular»
Para Galdón, «es muy grave que esta iniciativa se haya puesto en marcha sin el conocimiento y autorización de los padres de la región, sin consenso y a escondidas, para sacarlo a la luz 4 meses después de su inicio ya consumado».
Ambos coinciden en que «estamos ante algo muy grave, y no vamos a estar cruzados de brazos«. «La educación es competencia de los padres y vamos a proporcionar a los AMPAS un documento para que los padres, amparándose en la Constitución, exijan a los centros donde estudian sus hijos información previa sobre el contenido de estas charlas, así como que los menores no puedan acceder a charlas sobre valores sin consentimiento paterno expreso y por escrito«.
«No tenemos nada en contra de las personas del colectivo LGTBI, a las que respetamos su dignidad y sus derechos, así como condenamos cualquier tipo de discriminación o agresión que sufran por razón de su orientación sexual, pero no está justificado que impongan su visión al resto de la sociedad como la única verdad posible«.
Si la Consejería insiste en esta iniciativa, «desde el Foro de la Familia nos reservamos el derecho a tomar las medidas que consideremos oportunas en aras de defender el bien superior del menor«.