CADA VIDA IMPORTA
RAZONES PARA MANIFESTARSE EL 14 DE MARZO
- Nos manifestamos el 14M para seguir mostrando nuestro rechazo a la decisión de no derogar la “ley del aborto” y para reivindicar leyes que defiendan la vida de todos en cualquier circunstancia y sin excepciones. Seguimos defendiendo la causa de la vida sin miedo a hacernos presentes a pesar de las incertidumbres existentes en el panorama político español actual.
El 14M pretende reforzar y reafirmar en la conciencia de la sociedad española –y, por reflejo, en todo el mundo- que no vamos a acostumbrarnos al aborto; que no vamos a callar ante el abandono de la defensa de la vida por parte de los gobernantes; que no vamos a dejar solas a las mujeres embarazadas.
- El 14M tiene como objeto, también, que los partidos políticos –todos- recuerden que el derecho a la vida es el primero de los derechos que tenemos todos los seres humanos y que existe un amplio sector del electorado para el que esta cuestión de la vida y la maternidad es muy importante y será factor determinante a la hora de decidir el voto. Exigimos una voz que nos represente en el Parlamento y en el Gobierno. Ningún partido político puede razonablemente esperar que los ciudadanos votemos a quien desprecia lo que nosotros apreciamos, ni a quien nos pide el voto para una cosa y hace la contraria en temas innegociables.
El 14M queremos hacer patente que la voz de la vida pide y no dejará de pedir, un espacio en la vida española, también en la vida política, en las leyes y en las políticas públicas, hoy, mañana y siempre. Porque la defensa de la vida no debe ser discutible ni opcional; es algo irrenunciable y está por encima de situaciones políticas coyunturales.
- El 14M pretende que todos sepan que los no nacidos tienen una voz para hacerse presentes: nuestra voz.
El 14M pretende reforzar y garantizar la continuidad del compromiso social con la mujer embarazada, para que se refuercen y potencien las redes sociales de apoyo a la maternidad.
- El 14M queremos decir un inmenso SÍ A LA VIDA de todos: de los no nacidos y de las mujeres embarazadas; de los enfermos terminales a los que amenaza la eutanasia; de las víctimas de la violencia doméstica y de los diversos terrorismos; de los embriones humanos manipulados, destruidos o desechados; de los que sufren y viven en circunstancias no acordes a la dignidad humana porque tienen capacidades diferentes o por injusticias económicas y laborales; de todos los excluidos y marginados por la falta de justicia social y de una adecuada jerarquía de valores.
Porque sabemos que la lucha por los derechos humanos y contra la marginación social no acaba con la defensa del no nacido, pero comienza por ella, al ser el momento en el que se encuentra más amenazado e indefenso, el 14M queremos celebrar con todos los pueblos del mundo elDía Internacional de la Vida.
Madrid, 29 de enero de 2015