En algunos sectores de la opinión pública occidental se ha abierto paso una inquietante prevención contra la presencia pública de la religión. Desde tales instancias, se aboga por un espacio público neutro y “laico”, libre de “contaminaciones religiosas”. Se aspira así a un mundo sin Dios, donde la religión resulte irrelevante para construir la sociedad. El autor ofrece respuestas a este desafío.
Francisco Santamaría (Logroño, 1957) es Doctor en Filosofía por la Universidad de Navarra, pertenece desde 1980 al Cuerpo de Profesores de Secundaria (Filosofía) y es miembro del Grupo de Investigación “Culturas, religiones y derechos humanos en la sociedad actual”, de la UNIR.