El gobernador de Indiana, Mitch Daniels, promulgó el martes una reforma legal que impone una de las más duras restricciones al aborto en Estados Unidos y convierte al estado en el primero del país que le retira la financiación Planned Parenthood. La multinacional proabortista acudió de inmediato a una corte con la intención de revocar la ley. La juez federal de distrito Tanya Walton Pratt podría pronunciarse el miércoles sobre la solicitud.
Daniels, un republicano conocido por sus rigurosas medidas fiscales, sopesa la posibilidad de presentarse a las elecciones para la presidencia estadounidense en el 2012. Al poner su firma en la iniciativa sobre el aborto, la imagen de Daniels podría resultar favorecida entre los votantes conservadores, que se desilusionaron por los llamados anteriores del gobernador a una «tregua» republicana en los asuntos sociales.
Daniels no defendió públicamente el proyecto, el cual no formaba parte de su agenda legislativa, pero dijo que siempre ha apoyado las restricciones al aborto.
El gobernador convirtió el proyecto en ley el martes junto con otras 79 iniciativas. La ley elimina unos tres millones de dólares en fondos públicos para la denominada salud reproductiva.
Dicha organización considera que la ley es inconstitucional y viola las leyes federales. También dice que 22.000 pacientes podrían quedar sin acceso a diversas pruebas del papanicolau y servicios ajenos al aborto.