El Foro quiere dar el aplauso de la semana a la Asociación por la Defensa del Derecho a la Objeción de Conciencia (ANDOC) por haber conseguido que el Tribunal Supremo haya dado la razón al farmacéutico sevillano, Luis Melgarejo, tras garantizar su derecho a ejercer la objeción de conciencia en el desarrollo de su profesión al negarse éste a dispensar en su farmacia la píldora del ‘día después’.
«Somos los farmacéuticos los que estamos ante el paciente y, en muchos casos, los tenemos que aconsejar y se valora nuestra labor profesional ante una imposición que a muchos no nos parecía la correcta», y con más motivo «cuando no vienen bajo prescripción médica» ha manifestado el farmacéutico.