El domingo 25 de marzo los eslovenos rechazaron en referéndum, con un 55% de los votos a favor y un 45% en contra, el nuevo Código de Familia que hubiera permitido casarse a las parejas homosexuales y acceder a los derechos a que da acceso el matrimonio, con la salvedad de la adopción; en lugar de conjunta, sólo se contemplaba la del hijo biológico de la pareja. La participación fue del 26% de la población.
El nuevo Código de Familia, que cuenta con 309 artículos, fue redactado por el anterior gobierno de centro-izquierda y aprobado por el Parlamento en junio de 2011. La oposición a esta medida ha estado promovida principalmente por la organización ciudadana The Civil Initiative, que en febrero de 2012 presentó 42.000 firmas para convocar el referéndum (se necesitaban 40.000).
“Los ciudadanos de Eslovenia –explica Ales Primic, director de The Civil Initiative– han mostrado al gobierno y a toda Europa que las demandas de privilegios para una minoría no pueden satisfacerse a costa del derecho más fundamental de cada niño: el derecho a tener un padre y una madre”.
“A quienes querían sacrificar ese derecho, la gente de Eslovenia les ha dicho de forma clara: la maternidad y la paternidad son, ambas, únicas y valiosas; queremos que se proteja el matrimonio entre hombre y mujer; y queremos que la próxima generación crezca en el ambiente más favorable posible”.
A favor del nuevo Código de Familia estaban los grandes medios de comunicación y el Presidente de Eslovenia, Danilo Turk. También la mayoría de las fuerzas políticas del Parlamento. Junto a The Civil Initiative ha estadola ONG EuropeanDignity Watch.
La baja participación en el referéndum parece indicar que los que se han movilizado han sido los más comprometidos en el tema, mientras que la gran mayoría de la población no está especialmente interesada en cambiar la legislación en este punto.