El estado norteamericano decidirá el 8 de noviembre en sus comicios municipales si reconoce la vida desde el momento de la concepción, lo que convertiría en crimen la interrupción del embarazo. Al menos otras cinco regiones también impulsararían la misma reforma
Los habitantes de Mississippi votarán el próximo 8 de noviembre en conjunto con sus elecciones municipales una controversial iniciativa que busca suprimir el aborto redefiniendo el concepto de persona y extendiéndola hasta el momento de su concepcioón.
Se trata de la Enmienda 26, también conocida como Enmienda de Personificación, que consideraría como ser humano al óvulo fertilizado, haciendo imposible detener el embarazo ya que el aborto sería entonces considerado asesinato.
Esta reforma, que ya fue rechazada dos veces por los ciudadanos del estado de Colorado, volvió a cobrar impulso en el estado sureño 
gracias al dirigente ultraconservador Les Riley, quien se encargó de redactar el proyecto y recolectar, junto a su grupo Parenthood Mississippi, la cantidad de firmas necesarias para que la enmienda aparezca el día de los comicios.
En los Estados Unidos, país en el que el movimiento pro-vida cobró fuerza desde la elección de George W. Bush al comienzo de siglo, el aborto está considerado un “derecho constitucional” tras un fallo de 1973 –conocido como el caso Wade– del Tribunal Supremo de Justicia en el que se reconoció que la mujer tiene derecho a detener su embarazo en los primeros meses de vida.
Por esa razón, según numerosos activistas y juristas, esta enmienda, que incluso deja afuera los casos de violación o incesto como justificativo para abortar, sería ilegal y le han reclamado a las autoridades que den marcha atrás a la inclusión de la papeleta para votar esta modificación durante las próximas elecciones.
