Nota de Prensa
Mientras los tribunales se rinden ante el aborto, la sociedad española reacciona cada vez con más fuerza en defensa de la vida
Para la Audiencia provincial de Barcelona las violaciones, en materia de acreditación del supuesto de hecho que teóricamente haría no punible el aborto, son detalles administrativos irrelevantes
El tribunal catalán no ha tenido reparo alguno para afirmar que -si de aborto se trata- todos los límites y restricciones legales son ‘pelillos a la mar’.
Recuerda mucho esta sentencia a la reciente del TC sobre el mal llamado ‘matrimonio homosexual’.
Estos magistrados pasarán a la historia como albañiles laboriosos en la obra de destrucción del imperio de la Ley.
Conviene que el Ministro de Justicia tenga muy presente esta sentencia a la hora de redactar la nueva legislación que ha comprometido en materia de prácticas abortivas si de verdad quiere hacer una ley seria y que sirva para algo
Confiemos en que el Gobierno se sume a lo mejor del esfuerzo social.
Madrid 5 de febrero de 2013.- A la luz de la sentencia sobre el llamado ‘caso Morín’ el presidente del Foro de la Familia, Benigno Blanco, ha hecho las siguientes declaraciones:
1.- La sentencia de la sección sexta de la Audiencia Provincial de Barcelona que absuelve a todos los acusados en «el caso Morín» es un objetivo atentado al Estado de Derecho con manifiesto desprecio a la Constitución y a los valores y bienes por ésta protegidos (aunque sea escasa y tímidamente). Del relato de hechos probados que hace la misma sentencia se deduce la expresa y clara violación sistemática de los requisitos que hacían conforme a la ley de 1985 no punible un aborto; y sin embargo para el tribunal esas violaciones en materia de acreditación del supuesto de hecho que teóricamente haría no punible el aborto son detalles administrativos irrelevantes.
2.- La Audiencia Provincial de Barcelona acaba de darnos una prueba palpable de que -diga lo que diga la Constitución y el Tribunal Constitucional (TC) en su interpretación-, los poderes públicos se han autodesarmado para exigir el mínimo respeto a la vida del no nacido.
3.- El aborto se ha convertido en una isla de impunidad a la que no se aplica la ley; los negociantes del aborto, los que se lucran con su práctica, son los únicos empresarios y profesionales que se pueden permitir en la España de hoy día actuar al margen de las leyes sin consecuencia negativa alguna. Este es el mensaje de la Audiencia Provincial de Barcelona, que no ha tenido reparo alguno para afirmar que -si de aborto se trata- todos los límites y restricciones legales son ‘pelillos a la mar’.
4.- Esta sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona es una manifestación muy preocupante de la profunda crisis del Estado de Derecho en España: las leyes, incluida la Constitución, son algo maleable, adaptable, interpretable según la ideología y la opinión política de los operadores jurídicos y los climas de opinión. Recuerda mucho esta sentencia a la reciente del TC sobre el mal llamado «matrimonio homosexual» .
5.- Cuando en una sociedad fallan los jueces, cuando nadie defiende la ley, estamos en el terreno de la arbitrariedad, de la dictadura del poder, sea éste -¡qué más da!- el ejecutivo o el judicial.
6.- La desprotección jurídica del derecho a la vida está abriendo camino en nuestra sociedad a la destrucción del Estado de Derecho. Y la Audiencia Provincial de Barcelona acaba de aportar su granito de arena a reforzar esta tendencia.
7.- Quizá los magistrados de la Audiencia Provincial de Barcelona se sientan muy orgullosos de su aportación a la causa ‘progresista’, pero pasarán a la historia como albañiles laboriosos en la obra de destrucción del imperio de la Ley. Leyendo esta sentencia no he podido evitar recordar la película ‘Los juicios de Nuremberg’, interpretada por Spencer Tracy que recientemente una televisión nos permitió volver a ver en España.
8.- Conviene que el Ministro de Justicia tenga muy presente esta sentencia a la hora de redactar la nueva legislación que ha comprometido en materia de prácticas abortivas si de verdad quiere hacer una ley seria y que sirva para algo. No es de recibo que se mantenga una situación en la que la Constitución proclama el derecho a la vida de ‘todos’ y el Tribunal Constitucional dice que el aborto solo puede ser no punible si concurre un gravísimo conflicto entre bienes de igual relevancia constitucional, a la par que luego los tribunales ordinarios dejan impunes cualesquiera abortos con disculpas formales variadas.
Contrasta lo que dicen los tribunales con la positiva recuperación en la conciencia social del aprecio a la vida del no nacido que ponen de manifiesto realidades tan estupendas como el despliegue por toda España de la RedMadre de voluntariado de apoyo a las embarazadas y las masivas manifestaciones en apoyo a la mujer, la vida y la maternidad como la celebrada en Madrid en 2009 con más de un millón de personas en la calle.
Mientras los tribunales se rinden ante el aborto, la sociedad española reacciona cada vez con más fuerza en defensa de la vida. Confiemos en que el Gobierno se sume a lo mejor del esfuerzo social.