Con motivo del Día Internacional de la Vida, el presidente del Foro de la Familia, Ignacio García-Juliá, anima a todas las familias «a permanecer unidas en la esperanza en estos tiempos de crisis», y lanza un «reconocimiento y agradecimiento sincero a todas las personas que arriesgan la propia vida para curar y cuidar a los que más lo necesitan» en la grave situación actual.
«En circunstancias como las que estamos atravesando, se pone aún más de manifiesto el valor absoluto de cada Vida humana, merecedora de todo respeto y protección», dice García-Juliá, y recuerda que «una sociedad que protege la vida de los más débiles es una sociedad humana y próspera».
«Ante las constantes discriminaciones que sufre la vida humana en función de su etapa de desarrollo vital, de su edad, de su estado de salud, del número de cromosomas o de cualquier otra condición, es necesario lanzar un mensaje de esperanza y un recordatorio a los poderes públicos para que, una vez superada la crisis del coronavirus, se legisle para el bien común, empezando por respetar el derecho más fundamental de todos: el derecho a la vida», ha finalizado.