Recientemente recibimos en el Foro de la Familia una petición de comparecencia de la Junta General del Principado de Asturias con motivo del Proyecto de Ley de garantía del derecho a la libre expresión de la identidad sexual y/o de género que está en fase de tramitación, para exponer nuestro punto de vista en la materia.
Nuestro delegado en Asturias acudió y, coincidencia o no, fue el único de los asistentes que expuso algo distinto de un “sí a todo”. De nada sirvieron argumentos y razones jurídicas, científicas, antropológicas y administrativas para cambiar mínimamente el curso de una decisión tomada de antemano.
Hemos elaborado un informe del Proyecto de Ley –que compartimos aquí con vosotros- en el que, al hilo del articulado del texto, recogemos de forma sistemática y argumentada los motivos en los que basamos la conclusión de que esa norma, en caso de ser aprobada, será innecesaria, contraria al ordenamiento jurídico, restrictiva en cuanto a derechos y libertades de todos los ciudadanos, supondrá una imposición ideológica, otorgará privilegios y creará nuevas obligaciones, etc.
Esta Ley se unirá próximamente a las que ya están en vigor hoy en otras doce Comunidades Autónomas sobre la misma materia y con los mismos planteamientos restrictivos de libertades: Andalucía, Aragón, Cataluña, Navarra, Madrid, Valencia, Extremadura, Galicia, Baleares, Canarias, Murcia y País Vasco.
Por eso, lo recogido en este informe es aplicable a todas ellas en mayor o menor medida, ya que el Proyecto de Ley de Asturias, en muchos puntos, se trata de un corta y pega de las demás. Lo único que es diferente es que las otras doce ya están en vigor y ésta no. Aún están a tiempo de evitar la aprobación de una Ley perjudicial para todos, incluidas las propias personas que no se sienten identificadas con su propio sexo.
Pronto serán trece las Comunidades Autónomas donde se imponga totalitariamente por Ley la ideología de género a todos los ámbitos de la sociedad. Puede que esta frase te parezca alarmista y por eso no te tomes en serio este asunto. No lo es. Tómatelo en serio.