Ante la proximidad de la jornada electoral para elegir al nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía , el presidente del Foro de la Familia, Ignacio García-Juliá, ofreció a todos los partidos políticos 100 medidas en favor de la familia.
«Ofrecemos a la clase política andaluza un centenar de medidas sociales y económicas en favor de la familia, que garanticen lo establecido por la Constitución Española y la Declaración Universal de los Derechos humanos para su bienestar, mejorar y favorecer la conciliación, la igualdad, el aumento de la natalidad y el respeto por el bien superior de los menores», explicó García-Juliá.
Se trata de propuestas «que pueden ser aplicadas por cualquier Gobierno, sea del color que sea, puesto que son neutrales políticamente, como no podía ser de otra forma, puesto que la familia no es de derechas ni de izquierdas. El documento pone especial atención en las familias más vulnerables, como son las numerosas, monoparentales, con personas dependientes a cargo o en situación de pobreza«.
El presidente quiso destacar que la Familia, «entendida como la primera institución social, preexistente a la propia sociedad y fundamento de la misma, necesita de una especial protección por parte de los poderes públicos y estos tienen el deber de salvaguardarla y asistirla según su valor, y favorecer su prosperidad a través de medidas sociales adecuadas. En este sentido, la Declaración Universal de Derechos Humanos refleja esta concepción en los artículos 16, 23 y 25, al igual que la Constitución Española en su artículo 39«.
Necesidades reales de la institución
Por ello, «consideramos fundamental la implantación de la perspectiva de familia en las políticas de la Comunidad autónoma, el requerimiento de un informe de impacto de familia de las normas que se pretendan aprobar y la creación de un observatorio de familia«.
«Presentamos un documento que refleja la realidad y las necesidades de las familias. Una serie de medidas fiscales, económicas y sociales que ponen el foco en la conciliación, la natalidad, la educación y la defensa de la vida. Se trata de una respuesta a lo que señala la sociedad española a través, por ejemplo de la última encuesta de fecundidad del INE, que muestra el deseo de los españoles por tener hijos y formar una familia, algo que ven en peligro especialmente por la realidad laboral de nuestro país».