Uno de cuatro embarazos, acaba en aborto provocado en España. Número de abortos en España sigue subiendo.
Baja la vida, sube la muerte.
El INE publicó este mes el número de nacimientos en España durante 2019. Como cada año desde hace más de un lustro, vuelven a caer. El índice de fecundidad se encuentra ya en 1,24 hijos por mujer, tan lejos del reemplazo generacional. Sólo hay 5 países en el mundo por debajo de España en el ránking de hijos por mujer, entre los que se encuentran aquellos que restringen la natalidad.
El mismo INE publicó hace meses la encuesta de fecundidad en España, cuyos resultados fueron dignos de recordar: el 75% de las españolas desearían tener dos o más hijos. Que algo estamos haciendo mal, es evidente. Que existe una brecha entre los deseos de las mujeres y la realidad, también.
Esta semana publica el Ministerio de Sanidad los datos de abortos provocados en España en el mismo período: 99.149. Y eso sin contar los producidos por píldoras abortivas. Dicho de otra manera, de cada cuatro vidas que se conciben en España, una nunca llega a nacer, víctima de la tragedia del aborto.
La gasolina no apaga fuegos. ¿Cae la natalidad y estamos ante un infierno demográfico sin precedentes? Se promociona el aborto. ¿Aumentan los fallecimientos de enfermos y ancianos de manera desproporcionada? Se promociona la eutanasia. Baja la vida, sube la muerte. Y con publicidad.
Un país sin niños es un país sin futuro, pero si esto ocurre por sexto año consecutivo, con los poderes públicos tocando el violín sobre el barco que se hunde, es un país sin presente.
Menos mal que la realidad, la Familia, permanecerá, y brillará, antes o después, sobre las oscuras cenizas de los restos de una sociedad que abandonó el respeto, la justicia y la humanidad.
Feliz Navidad.
Javier Rodríguez
Director General del Foro de la Familia.