La educación es necesaria en todos los sentidos; es uno de los factores que más influye en el avance y el progreso de las personas y de las sociedades.
La educación no puede ni debe reducirse a adquirir meros conocimientos para lograr un futuro puesto de trabajo; debe ser una oportunidad para elevar las capacidades científicas y técnicas de cada persona; además, la educación enriquece la cultura, los valores y ayuda a formar valiosos ciudadanos.
La educación superior es una palanca de cambio, tanto de la persona como de la sociedad. “La universidad es, o debería ser, el epicentro del mundo de las ideas, la investigación y del pensamiento científico y – sobre todo- humanista de nuestra sociedad”, señala Víctor Meseguer en un artículo publicado en La Verdad el pasado 11 de mayo.
“El objetivo central de nuestra universidad es, o debería ser, el desarrollo de las personas mediante aprendizajes de todo tipo, formando ciudadanos libres, responsables y solidarios que puedan desarrollar sus capacidades críticas, creativas, de elección, participación y decisión en una sociedad cada vez más compleja y cambiante”, continúa Meseguer.
En ésta línea trabaja la Universidad Católica de Murcia (UCAM). En sus aulas se forman cientos de deportistas de élite y es que este modelo educativo sabe conjugar la formación académica con la formación en valores como el esfuerzo, la constancia o la tenacidad.
En un reportaje de El País publicado en noviembre de 2016, Saúl Craviotto explica: “Necesitamos formarnos, pero compaginar los entrenamientos y las pruebas con la universidad es casi imposible. Si acepté la oferta de la UCAM es porque nos dan herramientas de estudio y flexibilidad”. En ello coinciden todos los deportistas de grandes competiciones que pasan por esta Universidad como Ruth Beitia, Teresa Perales o Javier Fernández.
La aplicación del modelo ha sido tan exitosa que la UCAM es la segunda universidad con más medallas olímpicas logradas por sus alumnos. Mireia Belmonte, en el mismo reportaje de El País, dice: “Éste es el mejor sistema para compaginar el deporte y el estudio” y es que el sistema que sigue la UCAM ha permitido a muchos deportistas estudiar, entrenar y ganar además de formarlos como personas en los valores tan necesarios para el deporte y para la vida.