El presidente del Foro de la Familia, Mariano Calabuig, la directora general, Luisa Maldonado, así como algunos colaboradores del Foro han asistido esta mañana a la conferencia impartida por el Catedrático de Sociología de la Universidad Complutense de Madrid, Don Julio Iglesias de Ussel, en la Jornada «Familia y sociedad en la España del siglo XXI» organizada por el Instituto CEU de Estudios de la Familia.
La ponencia ha tenido lugar en el Salón de actos de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Comunicación de la Universidad San Pablo CEU donde esta tarde seguirá la Jornada que finalizará con la conferencia impartida por Don Jaime Mayor Oreja, presidente de la Fundación Valores y Sociedad y de la Fundación One of Us, cuyo título es «Presente y futuro de la Familia en España».
La conferencia del profesor Iglesias de Ussel ha sido una dosis de optimismo para los que trabajamos en los temas referidos a la familia. En palabras del Catedrático «la familia nunca ha sido tan importante como en el siglo XXI». Actualmente existe una situación contradictoria y singular en la sociedad española y «es que el discurso oficial es hostil hacia la familia, constantemente trata de evaporar la presencia social de la familia, pero la realidad es precisamente la contraria, hoy más que nunca la familia es importante», continuó diciendo Julio Iglesias.
«Hay que tener en cuenta la gran capacidad que tiene y ha tenido siempre la familia para sobrevivir», afirmó el profesor de Sociología, «multitud de datos afirman que la familia no está en peligro. En las encuestas que se hacen a los jóvenes, estos puntúan en un 8 sobre 10 la valoración que tienen sobre sus padres»; además, resaltó que «nunca en la historia ha habido tantas familias cuidando de sus mayores».
La realidad familiar es un componente básico de la sociedad europea, de la vida cotidiana, y otras formas alternativas en cuanto a relaciones son minoritarias. Los movimientos feministas no apoyan ni amparan la familia y las asociaciones de familias no tienen peso en la esfera pública. Estas realidades sociales no impiden que el núcleo de la sociedad siga siendo la familia.
La realidad es que, según la configuración actual, un niño es cuidado por un padre y una madre. Cuando uno de los dos adultos desaparece de la empresa familiar, la situación se convierte, en general, en un obstáculo para el desenvolvimiento cotidiano de ese niño: las tareas domésticas se resienten así como las actividades escolares con una tasas mayor de abandono escolar, un menor acceso a la universidad, etc.
El profesor Julio Iglesias continuó la conferencia exponiendo la realidad social de los personas: «se han ido perdiendo los anclajes que cada individuo tenía debido a la movilidad geográfica por motivos laborales, la propia inestabilidad laboral, el aspecto político e ideológico e incluso el religioso, sin embargo, la familia es el único anclaje que se mantiene, es más, incrementa su centralidad». La familia siempre tendrá problemas pero esos problemas son para arreglarlos, el divorcio no es la solución. Iglesias de Ussel recordó el viejo adagio de nuestros mayores «si algo se rompe, se arregla pero no se tira a la basura» referido a la familia.
Hay tres factores, según Julio Iglesias, que determinan que nuestros jóvenes están preparados para formar y mantener una familia:
- La fidelidad: elemento básico que hoy en día cualquier joven busca en una relación que quiera que sea estable y de futuro.
- La relación actualizada con el trabajo doméstico. Hoy la gran mayoría de los jóvenes comprende la necesidad de repartir y responsabilizarse de las tareas domésticas.
- Los jóvenes quieren seguir teniendo hijos.
Sobre este tercer punto, Iglesias de Ussel manifestó que el verdadero problema es que actualmente la discriminación no es contra la mujer sino contra la maternidad, en el plano social y laboral. España que uno de los países europeos con la tasa de empleo a tiempo parcial más baja, sin embargo, en muchos países de Europa, sobretodo los nórdicos, la tasa de mujeres trabajadoras es muy elevada al igual que la tasa de mujeres madres. Por tanto, el problema español no es solo laboral, es social.
Por otra parte, a la hora de acceder a un puesto de trabajo en la sociedad actual, advirtió Julio Iglesias, además de lo académico se tienen bastante más en cuenta las cualidades personales. El capital humano que da la familia no lo da ningún otro tipo de experiencia, y más una familia numerosa: trabajo en equipo, escuchar al de al lado, capacidad de relación, resolución de conflictos, y un largo etc. «Ese capital humano es básico en las sociedades modernas y – animó Iglesias de Ussel – hay que implementarlo. Es lo que da consistencia a la sociedad, una sociedad promotora de bienes públicos y sociales además de bienes personales».
Para que la familia, que es tan importante como queda patente tras esta conferencia, sea visible, la sociedad tiene que moverse. «Deben ampliarse los servicios de medicación familiar, fomentar la pedagogía de la familia, de la convivencia, pero la familia tiene que salir a la vida pública», acabó diciendo el catedrático.
Por tanto, desde el Foro tenemos el compromiso y el deber para con todas las familias a las que representamos, de devolver a la familia al plano social y conseguir que las políticas de este país estén al servicio de la familia y no la familia al servicio de las políticas.