La seguridad en uno mismo es una fuerza fundamental que contribuye al bienestar y al éxito personal. Las familias son conscientes de la necesidad de educar para el desarrollo de la seguridad en los niños y niñas, pero sus intentos por lograrlo son, en muchas ocasiones, inefectivos. Educar niños seguros en sí mismos, es decir, que demuestren seguridad y confianza en sí mismos se convierte en un verdadero reto para padres, educadores ycolegios.
Y es que encontrar el equilibrio entre la libertad que les haga seguros y autónomos, y la protección que les evite peligros, no es tarea fácil.
La seguridad en uno mismo
La seguridad en uno mismo es la confianza en las propias capacidades, creerse capaz de hacer determinadas cosas, o al menos, de intentarlo. Es fundamental desarrollar la seguridad en uno mismo desde la infancia para lograr nuestras metas y superar nuestros retos diarios.
La base de una sana autoestima es la seguridad en uno mismo y contribuye a unas relaciones sociales satisfactorias.
Cómo se desarrolla la seguridad en uno mismo
Conocer cómo se desarrolla la seguridad en uno mismo nos será de gran ayuda para contribuir a potenciar ésta en los más pequeños.
Pautas para desarrollar en los niños la seguridad en uno mismo
1. Hazle ver qué crees en él o ella. Para sentirse seguros primero se miraran a sí mismos a través de ti, como en un espejo.
2. Muéstrate seguro de ti mismo. Si tú te muestras como una persona segura de ti misma, ellos tenderán a imitar tu actitud, sin darse cuenta y crecerán seguros de sí mismos.
3. No le transmitas tus miedos. A veces podemos tener miedo a que los niños y niñas fracasen, a que se hagan daño en el intento. Sin embargo, debemos evitar transmitirles ese miedo, que puede hacer que ni siquiera lo intenten porque se sienten inseguros. En lugar de eso podemos transmitirles el siguiente mensaje: puede que falles, pero debes intentarlo y si fallas yo estaré aquí para apoyarte.
4. Deja que se enfrenten a retos y que alcancen sus metas para demostrarse a sí mismos que son capaces de hacerlo. Se trata de buscar metas que supongan un reto, pero que sean accesibles. Si les proponemos retos imposibles se desanimarán antes de tiempo y si por el contrario, les proponemos un reto demasiado fácil no desarrollamos su seguridad.
5. Cuidado con las interpretaciones. Recuerda que la seguridad en sí mismo está relacionada con las interpretaciones que hacen, así que ayúdales a hacer interpretaciones más realistas y ajustadas. Para ello pregúntales lo que piensan acerca de determinadas experiencias, y ayúdales a pensar de otra manera.
Celia Rodríguez Ruiz. Psicóloga clínica sanitaria. Especialista en pedagogía y psicología infantojuvenil. Directora de Educayaprende.com. Autora de la colección Estimular los Procesos de lectura y escritura. Publicado en Hacer Familia